Contribucion del Proyecto Familia A.C. para la agenda de emprendimiento:

 Toda presentación efectiva debe de tener una estructura que conste de las siguientes 3 partes:

I           INTRODUCCIÓN.

 

1.1 Aún antes de iniciar la plática, durante la fase de presentación, hay que

hacerse muchas preguntas sobre el tema de la presentación y disponer del mayor número de respuestas y visión del mismo.

 

1.2       Se sugiere una brevísima presentación de los expositores, que incluya

nombre, tiempo de casados, número y edades de los hijos, y un logro importante que hayan tenido  como familia  (esto busca “destensar” y relajar el ambiente  entre la concurrencia y propiciar el ánimo para la plática).

 

1.3  Es un PRINCIPIO que se comience por lo más interesante, no por lo más           importante.

 

II      ESTRUCTURA

 

2.1 Con anticipación debe prepararse una secuencia de prioridades en lo que    ha de exponerse.

 

2.2    La plática debe de ser “diagramada” en un modelo o esquema gráfico que represente la secuencia de los temas. Este esquema debe ser dibujado y presentado en forma de acetato u otro apoyo visual,  y ser presentado tantas veces  como ayude a los participantes a ubicarse todo el tiempo acerca de dónde están y que sigue.

 

2.3    El diagrama debe de ser sencillo que permita, primero a los expositores y luego a los participantes ver lo más claramente posible la idea o tema central de la plática.

 

2.4   Al avanzar en la presentación hacer un resumen o síntesis de lo ya expuesto y de las aportaciones de la audiencia, pues no se hicieron esfuerzos para memorizarlos.

 

2.5   Presentar efectivamente la idea central, hacia la cual se dirigirá  el compromiso de la audiencia.

 

2.6       La exposición no debe quedarse  en la presentación conceptual  del tema, sino aterrizarla a la vida diaria  con ejemplos, los más posibles, de preferencia vivencias personales de los expositores.

 

2.7    Evitar en lo posible el leer, pues produce el efecto de desconexión entre

presentador y auditorio. Referirse en todo momento a los apoyos visuales (decirle a los participantes que lean en casa el texto que se les ha entregado, para profundizar en el tema).

 

          III     CONCLUSIÓN.

 

3.1  El cierre de la plática debe buscar no sólo el manejo adecuado del tiempo o la transmisión del objetivo, sino persuadir, convencer, impactar y emocionar a la audiencia, mediante la seguridad en sí mismos que muestren los expositores, su presencia, carisma y liderazgo.

 

3.2       Pero, aún más importante, debe ser una consigna que la plática mueva a la   acción y al compromiso de los participantes, de poner en práctica en su familia  los conceptos y consejos vertidos durante la conferencia.

 

3.3       Incluir en la presentación las formas en que se va a monitorear o a dar seguimiento al compromiso.

 

PRINCIPALES PROBLEMAS QUE LOS PARTICIPANTES DETECTAN.

 

SECUENCIA

 

–          No tomar en cuenta las necesidades y/o características del público.

–          Pasar por alto los “riesgos” que pueden hacer fracasar el compromiso.

 

EMISIÓN

 

– No involucrar efectivamente al auditorio mediante preguntas abiertas y cerradas.

-A la presentación le faltan tácticas para demostrar las ventajas de ‘comprar` nuevas ideas, conceptos, actitudes, actividades, etc.

-Expresar los mensajes de manera impersonal. No exteriorizar las actitudes internas, posiciones, citerior o estados de ánimo.

– Olvidar aclarar conceptos claves y correr el riesgo de que haya malos entendidos, o que se cometan errores.

 

EXPRESIÓN.

 

– Cuando se habla ante el público no se pronuncian con claridad las palabras difíciles, o las palabras que se desconocen, o se utilizan términos especializados  que muy pocos entienden.

– Al hablar no se hacen pausas o silencios.

– Al presentar hechos o datos claves, se hace vagamente, sin precisarlos con exactitud.

– Abundar en ideas, anécdotas o comentarios, siendo así demasiado redundante. Se descuida ser conciso.

 

VOZ

 

–          Cuando se habla, casi no varía el volumen de la voz y se mantiene bajo, o medio, o alto.

–          Ídem el tono de la voz, quedándose muy agudo, o medio, o muy grave.

–          Se mantiene una velocidad invariable (lenta y aburrida, o media, o precipitada).

–          Se repiten palabras como: “este…,” “sí…”, “no…”, “¿verdad?”, etc.

–          Tartamudeo

–          Al hablar, la voz se apaga o se quiebra.

–          No se puede hablar porque se siente sofocado.

 

COMPROMISO

 

–          Falta imprimir más energía, vitalidad y entusiasmo.

–          No se logra interesar y motivar al público.

–          Se evita aceptar y propiciar la participación, las preguntas y los comentarios del público.

–          No resulta fácil convencer con las ideas, argumentos y propuestas a los participantes.

–          No se logra comprometer a las personas a quienes se dirige, o se obtiene el compromiso de su palabra, pero a la hora de la verdad no la cumplen.

 

TIEMPO

 

–          No dedicar tiempo para preparar y ensayar la presentación.

–          Llegar tarde a la exposición. Ser impuntual para concluir. O por el contrario, precipitarse al terminar.

–          No dar prioridad ni tiempos a los puntos que se presentan.

–          Aunque este espacio de interacción no se dé entre expositores y audiencia, es importante prevenir lo siguiente).  No dedicar tiempo para que los participantes hagan preguntas y se involucren, o para que el expositor les pregunte y verifique así el grado de entendimiento, convencimiento y compromiso obtenidos.

–          No asignar tiempos para cerrar compromisos, programar cumplimientos y definir formas para monitorear o dar seguimiento a los compromisos.

 

                 OTROS PROBLEMAS  A EVITAR

 

CARA

 

–          Se evita mirar a las personas a quienes se habla, o, por el contrario, se excede en dirigirles la mirada, o ésta es de indiferencia, de agresividad o de altivez.

–          Se descuida el estado de la dentadura, que puede estar incompleta, o mal arreglada o sucia.

–          Se descuida el cabello, que puede ser sin cortar o arreglar para la ocasión, o con caspa en los hombros.

–          Al hablar se mantienen invariables algunos gestos, por ejemplo, mantenerse sonriendo forzadamente o se mantienen el ceño fruncido, u otros gestos.

 

CUERPO

 

–          Presentarse ante el auditorio habiendo descuidado el arreglo y figura personales.

–          Hablar encorvado, o muy erguido y con la cabeza tan atrás que demuestren prepotencia.

–          Hablar con los brazos cruzados, con las mano en las bolsas, con un dedo en la boca, o con abundantes movimientos de manos, brazos y cabeza.

–          Al exponer, permanecer inmóvil  en un solo lugar, o desplazarse exageradamente.

–          Mantenerse muy alejado o demasiado cerca de los participantes, no variar las distancias.

 

ACCESORIOS

 

–          Presentarse a hablar con los zapatos sucios o inadecuados para la ocasión.

–          Vestirse con ropa muy adelantada a la moda, o muy atrasada, o que no va con la ocasión, o con colores que no combinan.

–          Hablar ante el público sin un reloj que ayude a administrar el tiempo, o con uno que se ocupa de presumir.

–          Utilizar anillo que distraen la atención.

–          Hablar con anteojos de color que distraen la atención, u oscuros, que impiden a los asistentes ver los ojos del expositor.

 

VARIOS

 

–          No poner suficiente atención a las expresiones de las caras, posturas y movimientos de los asistentes, que manifiestan su estado de ánimo o sus intenciones

–          No darse cuenta de las condiciones buenas o malas de los equipos, materiales e instalaciones del lugar donde se hace la presentación.

–          No tomar nota de puntos clave que expresan los participantes.

–          Olvidar agradecer a los participantes sus aportaciones, esfuerzos y buena voluntad.